“Jamás olvidaré el momento en que vi al jefe de seguridad apuntar su arma directamente a mi persona, sentir el impacto de la bala, y quedarme tirado en el piso, escupiendo sangre. Estaba aterrado. Pensé que me moriría” dijo German Chub, sobreviviente de un brutal ataque con disparos en una mina canadiense en Guatemala. “Uso silla de ruedas gracias a una empresa minera canadiense. Me arruinaron la vida.”
Los abogados canadienses del Sr. Germán Chub Choc hoy dan a conocer la presentación de la demanda contra la empresa minera canadiense HudBay Minerals, por el ataque brutal con disparos que dejó parapléjico al Sr. Chub hace dos años en Guatemala.
Esta es la tercera demanda por violación de derechos humanos que se presenta en Ontario contra HudBay, con relación a actos de violencia cometidos en el Proyecto Minero Fenix en Guatemala oriental, que antes era de su propiedad.
La demanda alega que el 27 de septiembre de 2009, el Sr. Chub, un padre joven, fue disparado desde cerca con pistola, en una zona cercana a El Estor, Guatemala, en un ataque no provocado que perpetró Mynor Padilla, el jefe de seguridad para el Proyecto Minero Fénix de HudBay. El atentado le dejó al Sr. Chub con parálisis y ha perdido el uso de su pulmón derecho. La bala que causó su parálisis sigue alojada en su pecho.
La demanda alega que la administración negligente de su personal de seguridad en el proyecto, incluso la supervisión poco exigente, tanto en Canadá como en Guatemala, ha motivado este ataque brutal y arbitrario con arma de fuego. En esencia, la demanda afirma que HudBay soltó a hombres armados contra aquellos miembros de la comunidad que se oponían a las prácticas mineras de HudBay en sus comunidades.
Lamentablemente, en la parte rural de Guatemala abundan estos niveles extremos de violencia descontrolada. Algunos meses atrás, Human Rights Watch señaló que en Guatemala el 99.75% de los crímenes violentos se cometen impunemente. HudBay sabe que está operando en un país muy violento, pero en vez de contratar a su personal de seguridad o entrenarlo y supervisarlo con estándares aceptables, la subsidiaria de HudBay en Guatemala, contrató a personal de seguridad con antecedentes de violencia, y les dio armamento y ordenó su despliegue sin los controles o la supervisión que exigimos y damos por hecho en Canadá.
En ocasiones, estas tácticas violentas son utilizadas para reprimir la oposición a la minera. En Ontario, la empresa HudBay ya fue demandada debido al asesinato del dirigente comunal Adolfo Ich Cháman y por la violación en grupo perpetrado en contra de once mujeres indígenas provenientes de las comunidades de las que la empresa minera venía realizando desalojos forzosos. Estos casos se encuentran ante los tribunales en la actualidad.
Esta demanda presenta aseveraciones que aún no han sido probadas ante un tribunal. Los acusados tendrán el derecho de responder en el curso del juicio.
Si le interesa saber más sobre estos casos, vea: www.chocversushudbay.com
CONTACTARSE CON:
Cory Wanless, Klippensteins Barristers & Solicitors, cory.wanless@klippensteins.ca
Grahame Russell, Rights Action, info@rightsaction.org
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