Miguel Ángel Albizures
Son las sorpresas que nos da la vida, contra todos los pronósticos del mundo, gana quien en su campaña se mostró tal como es.
No sé
porqué nos extraña, nos sorprende la elección de Donald Trump, cuando
hace muy poco tiempo nosotros, los guatemaltecos, que dieron su voto por
quien hoy dirige los destinos de nuestro país, preferimos entre lo
malo, lo peor y se hablaron pestes y se siguen haciendo graves
señalamientos contra una mujer que aquí, como allá también aspiraba a la
Presidencia. No vamos a discutir en un breve artículo si tenían razón o
no, o si era el poder económico que tenía miedo que una mujer llegara
al poder y prefería algo blando para manejarlo a su sabor y antojo.
En las
elecciones de Estados Unidos, los norteamericanos, así como los latinos,
los afrodescendientes y las mujeres que dieron su voto por Donald
Trump, no escogieron lo menos malo, sino optaron por lo peor para que
dirija los destinos del país más poderoso del mundo. Son las sorpresas
que nos da la vida, contra todos los pronósticos del mundo, gana quien
en su campaña se mostró tal como es, pero quien también en su vida
privada es la representación de la discriminación, el racismo, la
xenofobia y hasta del poder económico. A Trump, la dignidad de las
mujeres le valió un pito ayer, y hoy y le valdrá siempre, pero ellas
pudieron inclinar la balanza y no lo hicieron, como debieron hacerlo los
latinos, los afros y hasta los asiáticos que hoy prefieren saborear el
fascismo en su máxima expresión.
¿Qué pasó
con la juventud?, quién sabe, pero los vimos en las tomas de televisión,
desgañitándose por el triunfo de Trump, parecían los playeras blancas
tomando las calles para defender los intereses de papi.
Desgraciadamente, aquí también hemos visto pueblos mayoritariamente
indígenas, votando por militares que masacraron sus comunidades. ¿Lo
hicieron por miedo? Quién sabe, pero en nuestro caso los resultados
están a la vista, en el caso de Trump, las grandes corporaciones estarán
bien representadas y posiblemente se necesite el surgimiento de unos
cuantos Luther King o de Mahatma Gandhi, para hacerle frente a la
discriminación, a la agresión contra migrantes y para hacerle frente a
la persecución de quienes no piensen como los que tienen el poder en sus
manos.
Posiblemente
veamos la construcción del muro y caer asesinados a miles de latinos
que van en busca del paraíso y encontrarán la muerte. Quizá se dé con
mayor descaro y con mayor fuerza, el resurgimiento del Ku-Klux-Klan, y
afros, latinos, asiáticos o musulmanes sufrirán las consecuencias de no
haber unido fuerzas para derrotar a la extrema derecha de Estados
Unidos. Hillary Clinton no era lo mejor, pero tampoco lo peor para estos
momentos cruciales por los que atraviesa el mundo.
http://elperiodico.com.gt/opinion/2016/11/10/entre-lo-malo-lo-peor/
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