TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- Con las “Jornadas Mario Payeras, los días de Chiapas”, el escritor, filósofo, poeta y comandante de la guerrilla guatemalteca es recordado a 24 años de su muerte.
POR: ISAÍN MANDUJANO
13 agosto, 2019
Esta semana, Yolanda Colom, esposa del actor de “El mundo como flor y como invento”, su sobrino Javier Payeras y un grupo de investigadores, académicos, cineastas y escritores, recorrerán la entidad para visitar los lugares donde permaneció clandestino siete años.
Uno de esos sitios es Copoya, un pequeño poblado de la etnia zoque, en las afueras de esta capital, donde el poeta –nacido en 1940 en Chimaltenango– vivió con su esposa. Ella regresó la tarde del lunes 12 y se encontró con hombres y mujeres que fueron sus vecinos, quienes conocieron a la pareja con otros nombres. Los sobrevivientes son todos de la tercera edad.
Desde 1990 Payeras y Colom radicaron en Chiapas, donde aquel elaboró –entre 1993 y 1994– el proyecto de la revista de política y cultura “Jaguar Venado”. Siete años después se mudaron a la Ciudad de México, donde murió de un paro cardíaco el 16 de enero de 1995.
Sus restos fueron enterrados en el panteón de Tuxtla Gutiérrez, al lado de los comandantes guerrilleros Marco Antonio Yon Sosa, Fidel Raxcacoj Xitumul y Enrique Cahueque Juárez, miembros del Movimiento Revolucionario 13 de Noviembre, asesinados por el Ejército mexicano en 1970. La tumba de Payeras fue profanada y sus cenizas robadas.
El guerrillero estudió filosofía en la Universidad de San Carlos (USAC), en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y en la Universidad de Leipzig, Alemania.
En Guatemala formó parte de las filas del Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP), en 1968, como uno de sus fundadores y como miembro de su Dirección Nacional. Payeras fue el ideólogo de la estrategia político militar del EGP, que se enfocó en las regiones petroleras de la Franja Transversal del Norte de Guatemala.
Tras la ofensiva militar del régimen del general Fernando Romeo Lucas García, en 1981 y 1982, en la Franja Transversal del Norte, y luego del golpe de Estado que encabezó el general Efraín Ríos Montt el 23 de marzo de 1982, Payeras planteó la derrota militar de la insurgencia y propuso una discusión para el cambio de estrategia de lucha revolucionaria que fue rechazada por la dirección del EGP. A raíz de ello rompió con su organización en 1984 por diferencias éticas, políticas e ideológicas.
Junto con un contingente de cuadros que le siguieron, en la Ciudad de México formó una nueva organización revolucionaria no armada, llamada Octubre Revolucionario.
Entre sus obras literarias destacan: Los días de la selva (1981) El trueno en la ciudad (1987), El mundo como flor y como invento (1987),
Latitud de la flor y el granizo (1991), Los fusiles de octubre (1991),Asedio a la utopía (1996), Poemas de la zona reina (1997).
Durante tres días –martes, miércoles y jueves–, Yolanda Colom y otras personalidades recordarán a Payeras y su paso por esta región del sureste mexicano, con presentaciones de libros, proyección de películas y documentales.
https://www.proceso.com.mx/595939/a-24-anos-de-su-muerte-chiapas-recuerda-al-filosofo-y-poeta-guerrillero-mario-payeras?fbclid=IwAR13YrbrLdJH7DeihH16LJ0kOHSJflhCjpsPyE5cg5NsC2HUI92KKy2sIe0
jueves, 15 de agosto de 2019
GUATEMALA: GANO LA OLGARQUIA, SEGUIRÁN LOS MISMOS
Las elecciones no han representado ningún cambio en Guatemala y el peligro de mayor restricción de derechos se cierne sobre el pueblo.
Por: Miguel Ángel Albizures
Uno siempre se pregunta qué pasa con el pueblo, qué hay en lo íntimo de cada ser humano para que sin más ni más, elija a sus verdugos, pues no es que elija al menos peor, sino al más pésimo que garantiza la continuidad de los planes de las mafias. Indudablemente, las cámaras empresariales tienen mucha capacidad para vender el peor producto, saben utilizar los medios de comunicación y saben cómo llegarle a la gente, cómo utilizar sus necesidades y explotar su ignorancia política. Lo que no entendemos es cómo logra incidir en sectores altamente politizados, democráticos o de izquierda que, en diversas formas, respaldan los planes de quienes, dicen son sus enemigos.
Antes de las elecciones circularon diversas opiniones en pro y en contra del proceso electoral, legitimando o deslegitimando a ambos candidatos, tanto en broma que es lo común, como análisis serios en los que se le hacía el juego a la ultraderecha. Entre todo lo que se dijo me llamó la atención una opinión que se refería favorablemente a Giammattei porque consideraba que con él en el poder, se podían “Agudizar las contradicciones” y eso favorecería a las izquierdas, pues se unirían para hacerle frente. Hace muchos años esa era la cantaleta con el agregado de que “a mayor represión, mayor organización”, pero la represión se volcó contra el pueblo, destruyó las organizaciones, desaparecieron y asesinaron a miles de dirigentes, y la unidad siguió siendo una utopía, las últimas elecciones son el más claro ejemplo de ello y todo porque quienes dicen luchar por los intereses del pueblo, han sido y siguen siendo incapaces de deponer intereses y presentarle una alternativa democrática que dispute el poder.
Las elecciones no han representado ningún cambio en Guatemala y el peligro de mayor restricción de derechos se cierne sobre el pueblo, pues se fortalecen las mafias en el control del Estado. La élite económica ha de estar feliz de ver a la izquierda y a los sectores democráticos, destrozarse a sí mismos y de colocar al futuro presidente y sus peones en los diversos ministerios, ya que eso le garantiza mantener al Estado a su servicio.
¿Qué nos espera? quién sabe, pues quien ganó, debería estar preso por ejecuciones extrajudiciales en el desarrollo del operativo Pavo Real, quizá una investigación exhaustiva del proceso nos podría llevar a encontrar el gato encerrado en ese juicio que lo salvó de culpa, siendo en ese momento uno de los directamente responsables del plan, pero así ha funcionado la justicia en Guatemala y no es de extrañar que las mafias sigan influenciándola. En el medio periodístico, hemos discutido la situación actual y lo que se puede dar en el futuro, y de lo único que estamos seguros, es que sea como sea, el derecho a la libre emisión del pensamiento será defendido y que para ello hay que estar preparado siempre, pues lo primero que pretenden los gobernantes, es silenciar las voces que alertan a la población de las malas actuaciones de los gobernantes en el ejercicio del poder.
https://elperiodico.com.gt/opinion/2019/08/15/gano-la-oligarquia-seguiran-los-mismos/
miércoles, 14 de agosto de 2019
GUATEMALA: LA OPORTUNIDAD QUE SE FUE Y LA QUE VIENE
“800,000 votos sumados MLP, Winaq, URNG suficientes para ir a segunda vuelta”.
Por: Miguel Ángel Sandoval
De diversas formas se dijo, por mucha gente, que las elecciones de 2019 podían haber sido una oportunidad para las fuerzas progresistas y de izquierda. Los resultados son en este sentido elocuentes. Una corriente progresista y de izquierda nada despreciable, que ganó varias diputaciones y alcaldías, que podría impulsar agendas conjuntas aunque sea un proceso cuesta arriba. Pues la realidad, testaruda como es nos dice que hoy por hoy, cada quien va por su lado, dispersos, sin mirar hacia el otro, parecido en ideas y propósitos.
En números claros, sumados MLP, Winaq, URNG, Libre, Convergencia, sin incluir Semilla y Encuentro por Guatemala, se habría estado con amplitud en segunda vuelta, con más de 850 mil votos y otro hubiera sido el resultado de las elecciones, pues se habría podido luchar por ganar las elecciones y la presidencia. Pero este escenario nunca fue parte de los cálculos políticos de un grupo de personas y organizaciones que por lo visto aman la marginalidad política y los liderazgos pírricos. O en su defecto, viven felices con llamados insípidos al voto nulo como muestra de sentido revolucionario.
En pocas palabras, todos pensando que solos y sin necesidad de la vieja o nueva izquierda, sin los progresistas de corazón o de ocasión, y sin las organizaciones sociales en pleno uso de sus características de autonomía y agenda propia, habrían alcanzado segunda vuelta y disputado la presidencia y acaso ganarla. Pero, otra vez la burra al trigo, como dice el viejo y certero refrán popular, optaron por la participación aislada, dispersa, desunida, cada quien rascándose con sus uñas, pequeños pero no contaminados, marginales pero de izquierda pura.
Parecería, luego de los resultados electorales alcanzados, que las fuerzas progresistas y de izquierda son incapaces de unificar esfuerzos, de dejar los liderazgos mesiánicos, las construcciones ideológicas del siglo pasado, pero sobre todo, la dificultad para encontrar las plataformas mínimas de las alianzas, de los acuerdos, de la concertación política. Conmigo o contra mí, parece que es la divisa que ha presidido la acción política de las fuerzas señaladas. La miopía política total.
Pero aun sabiendo este rasgo de las fuerzas progresistas y de izquierda, parece que es tiempo de trabajar por una plataforma electoral con vistas a las elecciones de 2023. No es algo prematuro, ni nada que diga que son cálculos electoreros. Es un hecho que ninguna de las fuerzas progresistas o de izquierda está apostando a la revolución social o a la insurrección para la toma del poder. Es por ello que el campo electoral se impone con todas sus características. No trabajar por el mismo por la vía de una amplia plataforma electoral, parecería la condena de los actuales grupos progresistas y de izquierda a su extinción como ya ocurrió con Libre y Convergencia, en por lo menos dos ocasiones. Todo por la insistencia en ir por separado al desastre y la derrota. Ya lo sabemos.
https://elperiodico.com.gt/opinion/2019/08/14/la-oportunidad-que-se-fue-y-la-que-viene/
Por: Miguel Ángel Sandoval
De diversas formas se dijo, por mucha gente, que las elecciones de 2019 podían haber sido una oportunidad para las fuerzas progresistas y de izquierda. Los resultados son en este sentido elocuentes. Una corriente progresista y de izquierda nada despreciable, que ganó varias diputaciones y alcaldías, que podría impulsar agendas conjuntas aunque sea un proceso cuesta arriba. Pues la realidad, testaruda como es nos dice que hoy por hoy, cada quien va por su lado, dispersos, sin mirar hacia el otro, parecido en ideas y propósitos.
En números claros, sumados MLP, Winaq, URNG, Libre, Convergencia, sin incluir Semilla y Encuentro por Guatemala, se habría estado con amplitud en segunda vuelta, con más de 850 mil votos y otro hubiera sido el resultado de las elecciones, pues se habría podido luchar por ganar las elecciones y la presidencia. Pero este escenario nunca fue parte de los cálculos políticos de un grupo de personas y organizaciones que por lo visto aman la marginalidad política y los liderazgos pírricos. O en su defecto, viven felices con llamados insípidos al voto nulo como muestra de sentido revolucionario.
En pocas palabras, todos pensando que solos y sin necesidad de la vieja o nueva izquierda, sin los progresistas de corazón o de ocasión, y sin las organizaciones sociales en pleno uso de sus características de autonomía y agenda propia, habrían alcanzado segunda vuelta y disputado la presidencia y acaso ganarla. Pero, otra vez la burra al trigo, como dice el viejo y certero refrán popular, optaron por la participación aislada, dispersa, desunida, cada quien rascándose con sus uñas, pequeños pero no contaminados, marginales pero de izquierda pura.
Parecería, luego de los resultados electorales alcanzados, que las fuerzas progresistas y de izquierda son incapaces de unificar esfuerzos, de dejar los liderazgos mesiánicos, las construcciones ideológicas del siglo pasado, pero sobre todo, la dificultad para encontrar las plataformas mínimas de las alianzas, de los acuerdos, de la concertación política. Conmigo o contra mí, parece que es la divisa que ha presidido la acción política de las fuerzas señaladas. La miopía política total.
Pero aun sabiendo este rasgo de las fuerzas progresistas y de izquierda, parece que es tiempo de trabajar por una plataforma electoral con vistas a las elecciones de 2023. No es algo prematuro, ni nada que diga que son cálculos electoreros. Es un hecho que ninguna de las fuerzas progresistas o de izquierda está apostando a la revolución social o a la insurrección para la toma del poder. Es por ello que el campo electoral se impone con todas sus características. No trabajar por el mismo por la vía de una amplia plataforma electoral, parecería la condena de los actuales grupos progresistas y de izquierda a su extinción como ya ocurrió con Libre y Convergencia, en por lo menos dos ocasiones. Todo por la insistencia en ir por separado al desastre y la derrota. Ya lo sabemos.
https://elperiodico.com.gt/opinion/2019/08/14/la-oportunidad-que-se-fue-y-la-que-viene/
GUATEMALA: NUESTRO RECHAZO A LA APLICACIÓN DEL CONVENIO DE TRABAJO A TIEMPO PARCIAL DE LA OIT
Guatemala tiene uno de los salarios mínimos más bajos de la región. Pese a ello, el gobierno reaccionario de Jimmy Morales, en connivencia con el CACIF y grupos corporativos, no autorizó un aumento a dicho salario para el 2019, no obstante que la inflación aumento en 2,31% en 2018.
El salario mínimo para actividades agrícolas y no agrícolas es de Q2,992.37 mensuales, en tanto que para actividades de exportación y maquilas es de Q2,758.16. ¡Son salarios de hambre! Mientras tanto, la canasta básica alimentaria, según datos del INE, tiene un costo de Q3,559.84 y la canasta básica ampliada Q8,219.44 mensuales. La brecha entre los paupérrimos salarios mínimos y lo que realmente se necesita para sobrevivir es enorme: Q5,227.07 y Q5,461.28, respectivamente. Con el agravante que a más de la mitad de las trabajadoras y trabajadores, los que trabajan en actividades agrícolas en las grandes fincas, pese a que son los que producen la riqueza, la burguesía terrateniente no les paga ni siquiera ese miserable salario mínimo. Trabajan, incluso, por “salarios” de Q25.00 diarios. ¡Una criminal sobre explotación!
Las clases trabajadoras, además de ser explotadas ¡son expoliadas! con esas medidas. Esa es la verdadera causa de las penurias que pasa el pueblo trabajador. La corrupción de los políticos mafiosos que sirven a la burguesía y al imperialismo, es solo una consecuencia del podrido sistema capitalista, que nos explota y que obtiene inmensas ganancias con la explotación de nuestro trabajo.
Pero no contenta con esa explotación que sufren los pueblos y las clases trabajadoras, la burguesía acaba de conseguir por parte del narco corrupto gobierno de Jimmy Morales a través del Acuerdo Gubernativo 89-2019, la correspondiente reglamentación para la aplicación del Convenio 175 de la patronal Organización Internacional del Trabajo (OIT), conocido como Convenio sobre el trabajo a tiempo parcial.
Este convenio dice proteger a los trabajadores de tiempo parcial, pero su verdadero propósito es legalizar la contratación a tiempo parcial y, con ello, incrementar la explotación de las y los trabajadores. En esa sintonía, la medida que acaba de tomar el gobierno guatemalteco es una jugada que beneficiará a la burguesía, al empresariado, aunque argumente que es para la “protección” del trabajador y de los derechos humanos. ¡El más descarado cinismo!
El CACIF celebra la medida, pues ello significa que la burguesía incrementará sus ganancias a través del aumento de la explotación al instituir la contratación solo por horas y con un salario por abajo del mínimo. “Flexibilización laboral”, la llaman la burguesía y sus voceros; ¡criminal sobre explotación! la llamamos nosotros porque, en estricto sentido, eso es.
El Partido Guatemalteco del Trabajo llama a luchar y resistir contra la contratación a tiempo parcial y el Acuerdo Gubernativo 89-2019 que reglamenta el Convenio 175 de la OIT; a oponerse abiertamente a esta nueva forma de agravar, aún más, la situación de las clases trabajadoras guatemaltecas. Es una vil mentira que esa flexibilización laboral beneficie a quienes producen la riqueza en este país: las clases trabajadoras. ¡Las hunde más en la pobreza y la miseria!
El salario mínimo para actividades agrícolas y no agrícolas es de Q2,992.37 mensuales, en tanto que para actividades de exportación y maquilas es de Q2,758.16. ¡Son salarios de hambre! Mientras tanto, la canasta básica alimentaria, según datos del INE, tiene un costo de Q3,559.84 y la canasta básica ampliada Q8,219.44 mensuales. La brecha entre los paupérrimos salarios mínimos y lo que realmente se necesita para sobrevivir es enorme: Q5,227.07 y Q5,461.28, respectivamente. Con el agravante que a más de la mitad de las trabajadoras y trabajadores, los que trabajan en actividades agrícolas en las grandes fincas, pese a que son los que producen la riqueza, la burguesía terrateniente no les paga ni siquiera ese miserable salario mínimo. Trabajan, incluso, por “salarios” de Q25.00 diarios. ¡Una criminal sobre explotación!
Las clases trabajadoras, además de ser explotadas ¡son expoliadas! con esas medidas. Esa es la verdadera causa de las penurias que pasa el pueblo trabajador. La corrupción de los políticos mafiosos que sirven a la burguesía y al imperialismo, es solo una consecuencia del podrido sistema capitalista, que nos explota y que obtiene inmensas ganancias con la explotación de nuestro trabajo.
Pero no contenta con esa explotación que sufren los pueblos y las clases trabajadoras, la burguesía acaba de conseguir por parte del narco corrupto gobierno de Jimmy Morales a través del Acuerdo Gubernativo 89-2019, la correspondiente reglamentación para la aplicación del Convenio 175 de la patronal Organización Internacional del Trabajo (OIT), conocido como Convenio sobre el trabajo a tiempo parcial.
Este convenio dice proteger a los trabajadores de tiempo parcial, pero su verdadero propósito es legalizar la contratación a tiempo parcial y, con ello, incrementar la explotación de las y los trabajadores. En esa sintonía, la medida que acaba de tomar el gobierno guatemalteco es una jugada que beneficiará a la burguesía, al empresariado, aunque argumente que es para la “protección” del trabajador y de los derechos humanos. ¡El más descarado cinismo!
El CACIF celebra la medida, pues ello significa que la burguesía incrementará sus ganancias a través del aumento de la explotación al instituir la contratación solo por horas y con un salario por abajo del mínimo. “Flexibilización laboral”, la llaman la burguesía y sus voceros; ¡criminal sobre explotación! la llamamos nosotros porque, en estricto sentido, eso es.
El Partido Guatemalteco del Trabajo llama a luchar y resistir contra la contratación a tiempo parcial y el Acuerdo Gubernativo 89-2019 que reglamenta el Convenio 175 de la OIT; a oponerse abiertamente a esta nueva forma de agravar, aún más, la situación de las clases trabajadoras guatemaltecas. Es una vil mentira que esa flexibilización laboral beneficie a quienes producen la riqueza en este país: las clases trabajadoras. ¡Las hunde más en la pobreza y la miseria!
¡ORGANIZACIÓN Y LUCHA PARA DETENER LA FLEXIBILIZACIÓN LABORAL!
¡NO AL TRABAJO A TIEMPO PARCIAL!
¡EXIJAMOS Y LUCHEMOS POR QUE SE DEROGUE ESTA MEDIDA
CONTRA LAS CLASES TRABAJADORAS!
POR GUATEMALA, LA REVOLUCIÓN Y EL SOCIALISMO
PARTIDO GUATEMALTECO DEL TRABAJO
http://partidocomunistadeguatemala.blogspot.com/2019/08/nuestro-rechazo-la-aplicacion-del.html
jueves, 1 de agosto de 2019
DESPERTEMOS, MAÑANA SERÁ DEMASIADO TARDE.
No dejemos que “se nos arrugue el alma”, levantemos el espíritu y junto a él la bandera de la dignidad, si no lo hacemos hoy, mañana será muy tarde.
Por: Miguel Ángel Albizures
Me gustaría retomar una sabia frase de Facundo Cabral, que leí en un mensaje que me enviaron, “No envejece más la cobardía que el tiempo. Los años solo arrugan la piel, pero el miedo arruga el alma”, de forma que podamos reflexionar y ver si, además de nosotros, nuestra juventud está envejeciendo o si, por el contrario, al fin el miedo se ha vencido, y los sancarlistas, además de tomar el Musac y exigir la no privatización de la Usac, retoman las calles y hacen suyo el sentir de la mayor parte de la población que no quiere más a Jimmy en la Presidencia. Sabemos que pueden reprimir y que son capaces de todo, pues si pisotean la Constitución y les vale un pepino lo que dicen los magistrados de la Corte de Constitucionalidad o el Magistrado de Conciencia, qué podemos esperar.
Ya escuchamos el discurso amenazante del Ministro de Gobernación, el peón servil que firmó el acuerdo y que no duda en reprimir las protestas que se den contra una decisión a todas luces lesiva al país, pues dicho acuerdo implica, entre otras muchas cosas, una cesión de soberanía al ser utilizado nuestro territorio por el gobierno de Estados Unidos, para albergar a los peticionarios de asilo en su país, no es un simple acuerdo de cooperación técnica que conlleva más apoyo económico, ni más visas para guatemaltecos. Es un acuerdo hecho a espaldas del pueblo, que no conoció el Congreso y sin tener en cuenta las opiniones de diversos sectores e instituciones. Lo único cierto es que el Presidente, el Ministro de Gobernación y la de Relaciones Exteriores, se cobijan y arrodillan ante el imperio sin importarles un comino la
soberanía nacional.
El discurso sobre la soberanía, reiterado hasta la saciedad por el Gobierno y utilizado contra la CICIG, a la que se le acusó de injerencia extranjera, parece haber sido olvidado y se plegaron ante los intereses de Estados Unidos. Las amenazas de Trump de gravar las remesas y quitar apoyo financiero no son excusa para firmar el acuerdo, pues un gobierno comprometido con el país se enfocaría en disminuir los niveles de desigualdad y generar riqueza y fuentes de empleo dignas sin entregar el país, y sus riquezas, a intereses transnacionales, la solución no está en conseguir visas, sino en crear las condiciones para que miles de guatemaltecos no tengan que huir de su país.
Pero detrás de todo hay una trinca infernal que se siente bien representada por Jimmy y que cránea dar el moralazo para mantener el sistema y servirse de los recursos del Estado: El poder económico, aglutinado en el CACIF, la rosca de los militares y el crimen organizado y narcotráfico. Jimmy no va a renunciar sin la presión social y los ministros seguirán tolerando lo que hace el gobierno con tal de compartir las migas del poder, igualmente los diputados seguirán haciendo lo que les venga en gana, si no se tiende un cerco contra ellos y no vean al pueblo en las calles. No dejemos que “se nos arrugue el alma”, levantemos el espíritu y junto a él la bandera de la dignidad, si no lo hacemos hoy, mañana será muy tarde, el pacto de corruptos habrá logrado su propósito y el fascismo terminará de instalarse y con ello digamos adiós a nuestros derechos ciudadanos.
https://elperiodico.com.gt/opinion/2019/08/01/despertemos-manana-sera-demasiado-tarde/
Por: Miguel Ángel Albizures
Me gustaría retomar una sabia frase de Facundo Cabral, que leí en un mensaje que me enviaron, “No envejece más la cobardía que el tiempo. Los años solo arrugan la piel, pero el miedo arruga el alma”, de forma que podamos reflexionar y ver si, además de nosotros, nuestra juventud está envejeciendo o si, por el contrario, al fin el miedo se ha vencido, y los sancarlistas, además de tomar el Musac y exigir la no privatización de la Usac, retoman las calles y hacen suyo el sentir de la mayor parte de la población que no quiere más a Jimmy en la Presidencia. Sabemos que pueden reprimir y que son capaces de todo, pues si pisotean la Constitución y les vale un pepino lo que dicen los magistrados de la Corte de Constitucionalidad o el Magistrado de Conciencia, qué podemos esperar.
Ya escuchamos el discurso amenazante del Ministro de Gobernación, el peón servil que firmó el acuerdo y que no duda en reprimir las protestas que se den contra una decisión a todas luces lesiva al país, pues dicho acuerdo implica, entre otras muchas cosas, una cesión de soberanía al ser utilizado nuestro territorio por el gobierno de Estados Unidos, para albergar a los peticionarios de asilo en su país, no es un simple acuerdo de cooperación técnica que conlleva más apoyo económico, ni más visas para guatemaltecos. Es un acuerdo hecho a espaldas del pueblo, que no conoció el Congreso y sin tener en cuenta las opiniones de diversos sectores e instituciones. Lo único cierto es que el Presidente, el Ministro de Gobernación y la de Relaciones Exteriores, se cobijan y arrodillan ante el imperio sin importarles un comino la
soberanía nacional.
El discurso sobre la soberanía, reiterado hasta la saciedad por el Gobierno y utilizado contra la CICIG, a la que se le acusó de injerencia extranjera, parece haber sido olvidado y se plegaron ante los intereses de Estados Unidos. Las amenazas de Trump de gravar las remesas y quitar apoyo financiero no son excusa para firmar el acuerdo, pues un gobierno comprometido con el país se enfocaría en disminuir los niveles de desigualdad y generar riqueza y fuentes de empleo dignas sin entregar el país, y sus riquezas, a intereses transnacionales, la solución no está en conseguir visas, sino en crear las condiciones para que miles de guatemaltecos no tengan que huir de su país.
Pero detrás de todo hay una trinca infernal que se siente bien representada por Jimmy y que cránea dar el moralazo para mantener el sistema y servirse de los recursos del Estado: El poder económico, aglutinado en el CACIF, la rosca de los militares y el crimen organizado y narcotráfico. Jimmy no va a renunciar sin la presión social y los ministros seguirán tolerando lo que hace el gobierno con tal de compartir las migas del poder, igualmente los diputados seguirán haciendo lo que les venga en gana, si no se tiende un cerco contra ellos y no vean al pueblo en las calles. No dejemos que “se nos arrugue el alma”, levantemos el espíritu y junto a él la bandera de la dignidad, si no lo hacemos hoy, mañana será muy tarde, el pacto de corruptos habrá logrado su propósito y el fascismo terminará de instalarse y con ello digamos adiós a nuestros derechos ciudadanos.
https://elperiodico.com.gt/opinion/2019/08/01/despertemos-manana-sera-demasiado-tarde/