MARIO LOPEZ LARRAVE ¡VIVE! PROHIBIDO OLVIDAR

MARIO LÓPEZ LARRAVE

El 8 de junio de 1977 fue ejecutao extrajudicialmente el defensor de la clase obrera guatemalteca: Mario López Larrave, este hecho fue ejecutado por agentes de las fuerzas de seguridad del Estado. Lopez Larrave trabajo toda su vida por una Guatemala diferente. Brindó la asesoría necesaria a clase obrera por medio de la Escuela de Orientación Sindical, así como la creación de sindicatos a nivel nacional. Uno de los principales éxitos en su inmensa trayectoria profesional fue la formación del Comité Nacional de Unidad Sindical (CNUS) el cual fue una manifestación del grado de madurez y unidad que se estaba desarrollando en el movimiento sindical guatemalteco. Al tiempo que continuaba con su trabajo de asesoría a la clase trabajadora. La trayectoria de vida de López Larrave siempre estuvo determinada por su defensa constante de los sindicatos, así como velar por la unidad de las organizaciones de la clase trabajadora.

Compartimos un articulo de 2009 en homeje al compañero de los de siempre:

"Usted, compañero, es de los de siempre. De los que nunca se rajaron, ¡carajo! De los que nunca incrustaron su cobardí­a en la carne del pueblo. De los que se aguantaron contra palo y cárcel, exilio y sombra. Usted, compañero, es de los de siempre.

" Otto René Castillo.

Foto: Mauro Calanchina

Mario López Larrave (articulo escrito en el 2009)

Empresarios en pacto con los militares.

Miguel Ángel Albizures

A algunos les molesta que recordemos personajes como Mario López Larrave, que fue un ejemplo que muy pocos del gremio de abogados imitaron o se acercaron a la calidad de personas que como él, conjugaron lo ético con el amplio conocimiento del derecho y el servicio desinteresado a la clase obrera. En abril pasado hubiera cumplido 80 años de edad, pero el lunes 8 de junio se cumplieron 32 años de haber caído asesinado por los esbirros de esa época que actuaron respondiendo a un plan premeditado por los políticos de extrema derecha agazapados en el mal llamado movimiento de liberación nacional, y de elementos del sector económico que no soportaban la presencia en las discusiones de un destacado laboralista, a quien no podían vencer con argumentos rebuscados ni retorciendo la legislación laboral a su favor.

López Larrave se graduó de Abogado y Notario en 1958, año en que muchos de los nuevos abogados sólo buscaban ganar dinero, él se interesó en el derecho laboral, en cómo defender a los trabajadores de los patronos que los explotaban y esquilmaban. Era la época en que la “liberación” había disuelto por decreto las organizaciones sindicales y la persecución a la dirigencia era implacable. Como profesional se quedó dando clases en la Facultad de Derecho, de la cual fue secretario y decano. Durante su gestión se creó la Escuela de Orientación Sindical y la Práctica y Secretaría de Derecho Laboral del Bufete Popular. Desde entonces también se comenzó a estudiar la materia de Derecho Procesal del Trabajo.

Es difícil desligar al sector económico recalcitrante de esa época, de su complicidad en el asesinato de López Larrave, pues en 1977 eran los momentos de auge del movimiento sindical al cual él apoyaba decididamente y asesoraba en los diferentes conflictos surgidos por la firma de pactos colectivos de condiciones de trabajo. Matthew Brooke, en un importante análisis de las “Implicaciones de los empresarios en el conflicto” publicado en el Inforpress de la semana pasada, se pregunta refiriéndose a los empresarios: ¿Sólo fue responsabilidad moral? Y cita el informe de Recuperación de la Memoria Histórica (Remhi): “Esta situación llevó (a) un sector mayoritario de la dirigencia empresarial a establecer un pacto con la cúpula militar en el Gobierno para desarticular el movimiento popular, considerado un brazo más de la insurgencia. La alianza desató la peor ola de represión contra las organizaciones populares en la historia del país”, y en medio de esa ola fue asesinado Mario López Larrave y otros destacados profesionales.