UNIDAD Y RESISTENCIA NO VIOLENTA Ejerciendo nuestros legítimos derechos y libertades constitucionales y de ciudadanía, garantizados en la Constitución Política de la República y en Tratados Internacionales en materia de derechos humanos, aceptados y ratificados por el Estado guatemalteco. En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Paz, en la víspera del Día de san Francisco de Asís, el hombre del dialogo y la paz y ante la proximidad de la celebración del Día de la Resistencia Indígena. A la opinión pública nacional e internacional,
Hacemos saber:
Quienes firmamos este documento hemos constatado, desde nuestro compromiso social, que muchísimos guatemaltecos, hombres y mujeres, mantienen vivo en su espíritu una aspiración profunda: vivir en un país verdaderamente libre, en el que cada uno de sus habitantes, sin distinción alguna, puedan ejercer los derechos que da la Constitución de la República y se cumpla lo que la misma afirma desde su inicio: promover y alcanzar el bien común.
Al mismo tiempo somos conscientes de las obligaciones ciudadanas que la misma Constitución nos exige y queremos cumplirlas.
El régimen democrático que se pretendía construir ha fracasado en contenidos fundamentales y ello ha facilitado que vivamos en una situación social muy próxima a una dictadura de hecho. Entre un régimen autoritario y una dictadura el margen de distancia es mínimo. Lo afirmamos porque en el momento no existen pesos ni contrapesos, el poder se concentra en un grupo de personas, quienes buscan solamente sus propios intereses.
Ahora manda el crimen organizado sostenido por la violencia de los narcotraficantes y las redes de corrupción e impunidad. El principio de legalidad no se cumple y, como sucede en un sistema dictatorial, la sociedad no es regida por el Derecho y va a la deriva. El régimen corrupto y criminal existente busca aniquilar toda forma de oposición.
Desde nuestro análisis fruto de reflexiones comunitarias, percibimos que la independencia de Poderes no existe. Los tres Poderes del Estado se aliaron, actúan en forma conjunta y de acuerdo a lineamientos sugeridos por la élite económica y la cúpula autoritaria en el poder. Siguen una estrategia consensuada, para copar las instituciones democráticas y consolidar la corrupción e impunidad.
Ante este panorama desde nuestra conciencia ciudadana, orientada por valores éticos y en muchos sectores por la fe, nos hemos planteado qué debemos hacer para impedir que la flor de la esperanza en una sociedad diferente se marchite. Queremos que la esperanza florezca y nos lleve a encontrar juntos, hombres y mujeres que amamos la libertad y la justicia, caminos de solución que fundamenten y animen una convivencia en armonía y desarrollo integral.
Conscientes que no somos los únicos que tenemos esta perspectiva en el espíritu de lograr un consenso nacional, nos solidarizamos y apoyamos las luchas de resistencia no violenta que realizan distintos sectores, fuerzas sociales y organizaciones ciudadanas contra la corrupción, impunidad y las complicidades con el narcotráfico que de modo descarado se han apropiado de nuestro país.
Llamamos sin exclusión a todos los sectores, grupos, organizaciones, pueblos indígenas, estudiantes, profesionales, académicos, intelectuales, religiosos, amas de casa maestros, empresarios, artistas, periodistas, migrantes; operadores y administradores de justicia, periodistas en el exilio, patriotas; hombres, mujeres y jóvenes a sumarse a la CONVERGENCIA NACIONAL DE RESISTENCIA CNR, para desalojar del Poder Político a las redes criminales de corrupción e impunidad, que mantienen capturado al Estado y para promover la construcción de un país democrático y desarrollado integralmente.
Preocupa y compartimos con todos los ciudadanos, la indignación por el alto costo de la vida, el desempleo, la falta de oportunidades, los bajos salarios y la explotación laboral. Por la inseguridad pública y social, los altos índices de deserción escolar, hambruna y desnutrición crónica infantil que van en aumento. Por la represión contra la prensa, periodistas, operadores de justicia, defensores de derechos humanos y líderes sociales de las comunidades y de los pueblos indígenas.
¿Qué hacer para enfrentar este triste panorama? Sin perder la esperanza y el espíritu de lucha de la ciudadanía, hacemos este llamado, que inicia hoy con esta conferencia de prensa.
Podríamos señalar los graves defectos y las terribles carencias que sufre el Estado de Guatemala, pero queremos ser propositivos y reafirmar la necesidad de esta convergencia nacional activa, en la que hombres y mujeres responsables, honestos y con amor por el país, nos esforcemos para lograr que la flor de la esperanza siga floreciendo.
Sin embargo, no podemos dejar de mencionar, a modo de ejemplo algunas situaciones que demandan acción inmediata: el apoyo a periodistas que han tenido el valor de decir la verdad y por ello son perseguidos, la situación en la que se encuentra la ex fiscal Virginia Laparra, el hostigamiento contra el juez Miguel Ángel Gálvez, la preocupación por quienes sufren el exilio por haber defendido la justicia. No entramos en detalles de las actuaciones de quienes con sus actos destruyen la democracia y lesionan los derechos de la población guatemalteca.
Hoy llamamos a la conciencia de los guatemaltecos y guatemaltecas para que nos unamos, organicemos, participemos y resistamos sin utilizar la violencia en el ingente esfuerzo de cambiar este dramático y desafiante panorama. Llamamos a la unidad y organización, a la participación y resistencia no violenta para que juntos soñemos y trabajemos por una Guatemala diferente, luchando contra la corrupción, la impunidad y el fraude electoral del 2023, que ya tienen en preparación.
Nuestra actuación está legitimada por los artículos 28, 33, 34, 35, 44 y 45 de la Constitución Política de la República de Guatemala, fundamentada en el principio de la resistencia no violenta.
LA CIUDADANÍA HA DICHO ¡BASTA! CONVERGENCIA NACIONAL DE RESISTENCIA
Guatemala, 3 de octubre de 2022.
Obispo Álvaro Cardenal Ramazzini, Fray Armando González OFM, Alberto Morán Ichich, Amparo Gómez, Ángeles Rodríguez, Anderson Yan Carlos Barahona Pineda, Carmen Rosa De León Escribano, Cesar Augusto Espinoza Muñoz, Claudia Virginia Samayoa Pineda, Edgar Estuardo del Cid Leiva, Edgar Rosendo Amado Sáenz, Eduardo Rafael Vital Peralta, Edwin René Portillo De Paz, Erick Jesús Portillo De Paz, Edwin Portillo, Erick Jesús Granados Ortiz, Fernando Girón Soto, Frank LaRue, Factor Méndez Doninelli, Jonathan Menkos, José Manuel Martínez, José Hernández, Juan Luis Font, Juan José Monterroso, José Antonio Noval, Justo Soto, José David López, Juan Antonio Molina, José Francisco Murcia, Cesar Hernández, Leonel Barahona, Laura Yax, Herbert Álvarez, Haroldo Sánchez, Lidia Cruz, Luis Fernando Mack Echeverria, Luis Gregorio Bautista Gómez, Luis Pineda Del Cid, Moran Beto, Marcio Palacios, Mariel Aguilar, María Eugenia Aguilar Mijangos, Otto Rivera, Otto Paz, Pedro Camajá, Ramón Cadena, Ricardo Ardany Valdez Paredes, Susana López, Sergio Godoy, Ronaldo Robles, Santiago Yupe, Víctor Ruano, Toribio Pineda, Vinicio Morales, Walter Cuc, Walter García,
Asociación Colectivo No´j, Asamblea Ciudadana Contra la Corrupción y la Impunidad ACCI, Asociación Integral en Género y Derechos Humanos para América ASIGDHA, Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos CIEPRODH, CENTINELAS por la Dignificación del Estado, Consejo Apostólico Nacional de Guatemala, Coordinadora Institucional de Promoción por los Derechos de la Niñez CIPRODENI, Comisión Nacional para el Estudio de la Reforma del Sistema Penal y Penitenciario CONAREP, Conferencia de Religiosas y Religiosos de Guatemala CONFREGUA, Comité de Unidad Campesina CUC, Federación Guatemalteca de Escuelas Radiofónicas FGER, Fuerza Ciudadana, Federación Nacional de Organizaciones Sindicales de Guatemala FENOSGUA, Fundación para El Desarrollo de Organizaciones de Base FUNDEBASE, Mujeres por el Poder Constituyente, Instituto de Enseñanza para el Desarrollo Sostenible IEPADES, Red por la Paz y el Desarrollo de Guatemala RPDG, Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos-Guatemala UDEFEGUA.
UNIDAD Y RESISTENCIA NO VIOLENTA